1- ¿Quién es Jesús Corbacho?
Un hombre amante de su familia, un hombre con educación y respeto hacia el prójimo porque así me han enseñado a ser en mi casa, y un cantaor de Huelva con muchas inquietudes y con una gran afición a este bendito arte que es el flamenco.
2- ¿De dónde te viene la afición por el flamenco?
La afición me viene de mi padre, me dormía cantándome fandangos en vez de nanas. Él no ha sido profesional pero en Huelva raro es quien no se canta algún que otro fandango. Mi padre siempre ha escuchado a Caracol, a “El Pinto, a “El Sevillano”… Empecé a aficionarme al cante por los fandangos de mi tierra, y mi madre al verme mostrar interés empezó a comprarme discos y colecciones de flamenco y hasta ahora… aún aprendiendo.
3- Jesús, ¿Cómo ves el flamenco en estos momentos?
Creo que el flamenco goza de buena salud y que hay mucha gente defendiendo las raíces de esto, aunque haya gente también que se salen más por la tangente, pero eso siempre lo ha habido.
Lo que si veo hoy es que se etiqueta como “flamenco” a cosas que no lo son, y eso si me molesta… gente que aprovecha la universalidad de la palabra “flamenco” para comer de esto.
4- ¿Cómo definirías el cantar para el baile?
La verdad es que a mi me gusta mucho cantar para el baile. A fin de cuentas, el cante es “el cante” aunque en muchos espectáculos de baile de hoy no nos den la suficiente libertad para expresarnos como quisiéramos. A veces es complicado “cantar” tu verdad cuando cantamos en espectáculos de baile que están montados. Pero por otro lado sirven para conocer otras cosas otros cantes que uno suela hacer menos y como te digo a mi me encanta cantar para bailar.
5- ¿Cómo definirías el cantar para delante?
Me reitero en lo anterior de que a fin de cuentas el cante es “el cante”, pero en este caso si eres tú mismo quien pone y dispone. Tienes más responsabilidad aunque el compromiso con el arte sea el mismo.
La verdad que a mi, como a muchos de mis compañeros que cantan atrás, me gustaría hacer más cosas cantando delante, más que nada por el hecho de sentirme libre y poder expresar el cante cien por cien como yo lo sienta en ese momento, pero entiendo que ponerse ahí delante es algo complicado y por desgracia no suelen dar muchas oportunidades a gente que ya nos tienen encasillados en el cante para el baile.
6- ¿Dónde te sientes más a gusto en el baile o en solitario?
El cantar para baile me gusta mucho y es lo que viene dándome de comer desde hace ya muchos años, pero como ya digo echo muchos de menos hacer cosas en solitario porque tengo la necesidad de expresarme y de cantar y contar mi verdad.
Luego todo lleva un proceso, si ahora mismo te dan un recital en solitario pues cuesta dosificarse porque por desgracia no es algo a lo que uno esté acostumbrado, pero cuando haces tres o cuatro seguidos la cosa cambia, empiezas a coger el sitio y a sentirte como en casa, pero hoy por desgracia parece que es difícil contar con la confianza de quienes organizan. Veo muchas programaciones idénticas entre un festival y otro, y la verdad que a mi me gustaría escuchar a otros compañeros diferentes que creo que tienen mucho que contar, no digo que me tengan que llamar a mi, pero hay muchos cantaores que se merecen que los escuchen cantando delante.
7- Jesús, ¿Necesita el flamenco más unión entre nosotros mismos?
Por supuesto, toda la unión que pueda haber es poca. Pero ya te digo que por desgracia eso es algo imposible. Nosotros mismos desvaloramos nuestro trabajo, unos por necesidad y otros por querer tener trabajo a cualquier precio.
8- Actualmente, ¿cómo te encuentras? ¿algún proyecto en mente?
Bueno mi proyecto o mi meta siempre digo que es la del día a día, levantarme con las mismas ganas de cante y de flamenco, no perder la ilusión y seguir aprendiendo porque en esto nunca se deja de aprender.
Creo que me encuentro en un buen momento, porque tanto cantado para el baile como en solitario estoy intentando ser yo y cantar para mi. Eso creo que es importante. Antes hacía más cosas solo y tenía más presente siempre el ser yo cantando, pero trabajando tanto para el baile más veces se embrutece uno y con tanto nivel de trabajo tuve una época que me sentía que mi cante no correspondía con lo que yo sentía dentro de mi.
Ahora gracias a Dios estoy intentando recuperar ese “yo” del que te hablo “cantando para mi” y creo que voy por buen camino para llegar a esa meta personal de la que hablo, sin más pretensiones que esa, la de estar a gusto y que me guste lo que sale de mi, aunque soy bastante exigente.
9- Un cantaor.
Quedarse con uno creo que no sería inteligente por mi parte. Es como elegir entre gambas y jamón… te pueden gustar las dos cosas.
Caracol, Marchena, Pinto, Mairena, Pastora, Tomas, Camarón, Toronjo, Morente, Lebrijano…Y mis maestros, José de la Tomasa, Paco Taranto, Enrique el Extremeño… ha habido tantos.
10- Un guitarrista.
Paco de Lucía, Ricardo, Sabicas, Vicente Amigo, Josemi Carmona…
11- Un bailaor.
Farruco, Carmen Amaya, Mario Maya, Gades, Manuela Carrasco…
12- ¿Qué añadirías a esta entrevista?
Bueno añadir mi agradecimiento a cienxcienflamenco y a ti Marco por acordaros de mí y por la labor de difusión del flamenco que hacéis, y hacer un llamamiento a las instituciones para que apoyen de verdad al flamenco y a los flamencos pero de verdad, que luego decimos que es patrimonio inmaterial de la humanidad pero lo valoran más fuera que dentro de nuestras fronteras.
Y a los programadores en que se interesen por dar oportunidad a gente que no gozan de ella tanto en el cante como en la guitarra y el baile, que hay mucha gente con mucho potencial y mucha verdad que contar.
NOMBRE COMPLETO: Jesús Corbacho Vázquez
NOMBRE ARTÍSTICO: Jesús Corbacho
FECHA DE NACIMIENTO: 11/12/1986
LOCALIDAD O PROVINCIA: Huelva.
Os recomendamos sus redes sociales Instagram & Facebook.
Fotografías: Fr. Martínez & cienxcienflamenco
Entrevista realizada en 2019.
Más entrevistas en nuestra sección.
Muchas Gracias por tu atención Jesús, saludos.
Pedazo de artista donde los alla
Me encanta su flamenco, como el de siempre por derecho, como el bien dice hoy le llaman flamenco a cualquier cosa, que no es que esté mal pero hay que llamar a cada cosa por su nombre.
Olé tú Jesús.