Recordando a Marchena llena de luz la Suma Flamenca de Madrid
Sandra Carrasco y David de Arahal llevan su revolución a los Teatros de Canal en la programación del Suma Flamenca.
La gira de Recordando a Marchena sigue recorriendo escenarios entre vítores del público y la bendición de los críticos. Cada día que pasa el proyecto personal de Sandra y David ha adquirido el sentido de un espectáculo redondo, ágil y con mucha profundidad.
Tras dos años de trabajo cada vez que salen al escenario solo tienen que poner la guinda del pastel a un repertorio de Marchena que han descompuesto hasta los átomos y vuelto a recomponer nota a nota, matiz a matiz.
Anoche en la Sala Negra de los Teatros de Canal, con el público a pie de pista, Sandra Carrasco expandió todos los aromas que trae su cante, ante la mirada de un público que agradeció las esencias.
David de Arahal dirigió el espectáculo musical desde su guitarra, con su habitual exactitud, riqueza armónica y capacidad técnica como intérprete de su propia música. Dentro de unos años la escena flamenca de la guitarra va a valorar su aportación al instrumento.
En este viaje tienen la suerte de compartir escenario con José Luis López Fernández, fundador de la Camerata Flamenco Project, que aporta con su violoncello el ambiente y la melodía, para que no quede una nota sin contexto musical. José Luis es el abrazo que amalgama la guitarra del joven sevillano con la voz de nuestra artista global onubense.
Destacaron los Mellis de Huelva, y es que Marchena es especial también por su compás alegre. El garbo del ritmo estuvo en manos de los onubenses. También los coros y polifonías en esta recomposición del genial cantaor flamenco.
Benamargo como programador, pero también como crítico, sabe lo que hace y así se escuchaba en los corrillos de los habituales de la escena madrileña la loa al concierto. Junto a él andaban por allí grandes aficionados como Juan Luis Cano y periodistas expertos como José Manuel Gamboa, ambos emocionados tras bajar el telón virtual del concierto. Hay que agradecerles el cariño.
Como siempre las colombianas fueron el punto álgido del concierto, y todavía hoy resuena ese “quisiera cariño mío” que es ya un grito de la revolución de Marchena. Sandra terminó como se debe, por fandangos, y cuál fue la sorpresa, que hasta Candela, hija de la artista, tuvo un espacio para cantar un estribillo.
Ni preparado les sale mejor.
Por: Ángel Martínez.
Iluminación: Antonio Sánchez. | Sonido: Quique, Bebo y Bea.
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